Como en la panamericana con los compañerxs de la 60, en el Congreso por la reforma previsional, Pepsico, los
despidos en el Posadas ,en Guernica con las familias sin viviendas, y como ahora todos los miércoles, por
nombrar solo algunos casos de la represión vivida por las fuerzas de inseguridad y disciplinamiento social, lxs
trabajadores fuimos reprimidos por todos lxs buitres políticos que estuvieron en el sillón de Rivadavia.
Un miércoles más donde los abuelxs fueron reprimidos ferozmente, este miércoles por suerte no estuvimos los
mismos de siempre, porque tuvimos un apoyo popular que se expresó en las calles de la ciudad porteña. Aquellxs
abuelxs que los medios de incomunicación victimizan, son los que vienen haciendo frente a las políticas de hambre
y disciplinamiento miércoles tras miércoles, aunque son duramente reprimidxs.
Sin que sea noticia nueva las burocracias sindicales no estuvieron participando ningún miércoles, tampoco
representando a los trabajadorxs jubiladxs y menos poniendo el cuerpo. Tampoco me importa que ellxs estén, lo
que sí me preocupa es la pasividad de lxs trabajadorxs en apoyar de forma efectiva a sus compañerxs jubiladxs.
Los medios de incomunicación nos tergiversan diciéndonos que podría ser tu abuelo, pero yo les digo: “podrían
haber sido tu compañero de laburo”.
El/la jubiladx tiene que ser parte de la discusión salarial como miembro del gremio al que pertenecieron/
pertenecen, el aumento de sus jubilaciones tiene que ir a la par de las paritarias negociadas por cada sindicato.
Pero claro, venimos de decadas donde las voces de lxs trabajadorxs en los sindicatos no se escuchan, porque no
hay asambleas o participación, por los terribles métodos de control y muchas veces de tortura que instalaron las
burocracias sindicales para perpetuarse en el poder sindical.
Se pone en juego también la llamada moratoria previsional, que fue un derecho conquistado luego de años de
lucha de lxs trabajadores adultxs para tener un salario hasta sus últimos días de vida. Aquella moratoria fue un
parche a un problema real que tiene la burbuja capitalista, que es el trabajo no registrado o el problema del trabajo
no reconocido de las mujeres en sus hogares. Este problema es parte de una lucha sindical que no dimos y no
estamos dando, ya que año tras año el empleo en negro crece y el problema jubilatorio ya no sera solo de lxs
trabajadorxs adultxs sino un problema de la juventud trabajadora triplemente precarizada.
Pero compañerxs, que no se malinterprete esta lectura, como foristas creemos que la organización del pueblo para
enfrentar al capital tiene que ser con la herramienta económica, organizandonos con nuestros pares en los lugares
de trabajo y comunidad, para poner como manifiesto nuestra realidad e imponer los cambios que necesitamos
para una vida más digna. Pero claro que la emancipación es una tarea más ardua y larga que solo una lucha
sindical. Este plan de palos, disciplinamiento social y descomposición sólo puede suceder manteniendo cuatro ejes
como política social: Balas, Pacto, Pobreza y Desorganización.
BALAS y adoctrinamiento social: nos controlan, generando miedo al pueblo y a lxs trabajadorxs, llevando adelante
un plan sistemático de requisas a los barrios populares, recorte de alimentos para las ollas populares, presxs
sociales, desalojos desmesurados a las familias obreras, tirar y desalojar a la gente en situación de calle, silenciar
y vaciar espacios ganados por la lucha social, atacar a los espacios de memoria, mujeres y colectivos LGTBI+,
clausurar y amenazar a militantes sociales.
PACTO: no es algo que genere sorpresas, lo vienen haciendo hace años los burócratas. No aparecen en las calles
ni en ningún espacio donde lxs trabajadorxs estamos siendo blanco fácil de la represión y el ajuste económico.
Fácil es sentarse a escribir un documento de “repudio”o poner una fechita de movilización, sin pasar hambre ni ser
golpeados. Lejos están de pasar alguna de las situaciones que vivimos día a día: no llegar a pagar el transporte,
no tener plata para comer, tarifazos impagables, viviendas impagables, miedo al despido, etc.
POBREZA: su plan de adoctrinamiento económico de “soportar” el hambre y la miseria de familias trabajadoras,
donde no salen a las calles por miedo a perder sus trabajos o trabajar más horas hasta no tener tiempo ni para
estar con sus hijxs con el fin de llevarles un plato de comida. Más de un millón de pibxs se van a dormir sin comer,
no son solo cifras. Son pibxs y familias desesperadas por su realidad económica tomando así cualquier empleo
que les de unos pesos más para agrandar la olla. El disciplinamiento económico trae el vaciamiento de las calles.
DESORGANIZACIÓN PLANIFICADA: no esperemos nada de ellxs, seamos nosotrxs, como siempre, quienes
conquistemos o derrotemos este plan de miseria y disciplinamiento. Años enteros adoctrinandonos en la idea de
ellxs “solucionan” nuestros problemas, pero NO, año tras años nos entierran más a la miseria y la incertidumbre,
este plan neoliberal no seria tan facil si estuviéramos ORGANIZADXS. Esta manga de miserables de todos los
colores y tendencias posibles nos DESORGANIZAN y nos dividieron para que triunfen sus partidos.
No tengamos miedo, no nos conformemos, que no nos dividan y desorganicen. Siempre conquistamos nuestra
dignidad a través del apoyo mutuo entre pares organizandonos con nuestrxs compañerxs siendo nosotrxs mismo
quienes le ponemos voz a nuestras necesidades, NO otros que nada entienden de nuestra realidad como
trabajadorxs, jubiladxs y todos los sectores que peleamos por justicia social, trabajo, vivienda y comida.

